"La estafa de enseñar a enseñar"
Estrenaré mi blog haciendo un pequeño comentario a modo de reflexión personal acerca de la noticia estraída del díario "El Pais", publicada el ocho de Diciembre del 2008.
http://elpais.com/diario/2008/12/08/educacion/1228690803_850215.html
Desde mi punto de vista, creo que
tanto los que defienden el nuevo master, como los que lo critican, tienen parte de razón en sus argumentos. Sin embargo,
los que defienden una y otra postura, se centran en contraatacar los
argumentos del contrario sin pararse a reflexionar sobre lo que ambos están
comentando.
Creo que hay argumentos de ambas
posturas que son ciertos, en el sentido de que para tratar de llegar a enseñar
y transmitir unos conocimientos a los alumnos, no solamente hace falta haber
adquirido grandes y profundos conocimientos sobre eso que vas a enseñar, ni
tampoco ser un gran experto de la materia. Pero tampoco considero que sea suficiente conocer unas destrezas, enfoques o teorías
sobre la enseñanza y sus diferentes métodos,
una condición suficiente como para estar en una mejor disposición a la
hora de transmitir esos conocimientos, que los que únicamente son expertos en
la materia y sin embargo no conocen ni dominan esos métodos y estrategias.
Siento que para poder llegar a
ser un buen docente, no basta solo con dominar uno de los dos campos de
conocimiento a los que he hecho mención anteriormente, sino que es necesario
combinar los dos (el conocimiento que puede tener un físico por ejemplo sobre
la física, y los conocimientos que ha adquirido un pedagogo tras haber cursado
los años de su carrera). Pienso que es esto quizás, lo que se pretende conseguir
a través de ese master de Formación del Profesorado; aunar los conocimientos de
los expertos de diferentes ramas y materias (Matemáticas, Física, biología….),
con la adquisición de los contenidos didácticos y pedagógicos que van a
aprender en ese master; para que a través de la integración de ambos, se
consolide una formación lo suficientemente sólida y competente, como para estar
en disposición de enseñarla y transmitirla a los alumnos.
Siguiendo con el ejemplo de los
físicos, matemáticos o biólogos, después de leer detenidamente sus críticas y
opiniones, veo que se sienten obligados a hacer un Master para ampliar sus
conocimientos y enfocarlos al ámbito educativo, y consideran que en cambio los
pedagogos con haber cursado su carrera profesional están en mejor disposición
que ellos para llevar a cabo la docencia. Sin embargo consideran que estos
últimos, pueden haber adquirido muchos
conocimientos sobre cómo es mejor enfocar el aprendizaje, qué métodos o
estrategias son las más idóneas, cuales son los problemas o las dificultades
con las que se van a enfrentar … pero en cambio, sus conocimientos sobre las
matemáticas por ejemplo, son muchísimo más inferiores y limitados que los que
ellos tienen.
Desde mi punto de vista,
considero que ni unos son mejores, ni están más preparados que otros, sino que
tanto unos como otros han de formarse y adquirir los conocimientos que
necesitan para llevar a cabo la tarea docente (unos a través de masters y otros
a través del CAP); de ahí que
anteriormente haya expuesto que es necesaria
e imprescindibles la formación y la experiencia de los dos ámbitos
utilizados como ejemplos. Y que la formación permanente, el aprendizaje
colaborativo y la experiencia, son imprescindibles para consolidar este bagage de aprendizaje.
Para concluir, me gustaría añadir
mi punto de vista a lo que considero debe responder un buen docente, ya que
considero que es el tema de fondo que se plantea en este artículo periodístico.
El docente debe conocer los
contenidos de su área de enseñanza, ha de tener experiencia laboral y no sólo
teórica de la misma (justo lo que yo pretendo conseguir al finalizar mi doble
grado), utilizar diferentes métodos de acuerdo a los contenidos a enseñar. Debe
investigar, observar y experimentar constantemente para buscar la excelencia en
su acción educativa; toda su vida será poca para adquirir la experiencia y
aprendizaje que necesita. Debe ser consciente que enseñará todo lo que sabe en
ese momento concreto de su vida, por lo tanto, siendo humilde, será más sabio
dándose cuenta de los errores cometidos en el pasado y los que le quedan por
cometer.
Por lo tanto, “enseñar a enseñar”
será posible llevarlo a cabo si se tienen siempre presentes los anteriores presupuestos, y
siendo consciente de la importantísima misión que le corresponde al
docente: debe de ser el camino que abra la vida a sus alumnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario