Aplicación del Aprendizaje Autorregulado

Una vez descrito el significado de Aprendizaje autorregulado trataré de reflexionar sobre las actividades que realizaría para tratar de impulsarlo.

Para favorecer e impulsar el aprendizaje autorregulado lo primero que hay que tratar de conseguir como profesores, es hacer conscientes a los niños de sus  procesos de aprendizaje. ¿Cómo?  Haciendo que los niños sean los protagonistas de su propio aprendizaje, fomentando el trabajo colaborativo, tanto en pequeños como en grandes grupos, donde tomen conciencia de sus conocimientos y acciones, así como de la relevancia que tienen estas en el desarrollo del propio grupo.

Realizaría actividades donde la motivación jugase un papel importante y plantearía actividades lúdicas y dinámicas donde cada niño, no solamente aprendiese conceptos nuevos, sino que también disfrutase aprendiéndolos.

Para ello, trataría que cada alumno utilizara el método que más le gustese a la hora de llevar a cabo el  trabajo y el estudio de los diferentes temas. Habrá niños que les resulte mucho más fácil el estudio a través de un esquema, mientras que quizás haya otros que este método les resulte muy incómodo y sin embargo rindan mucho más a través de resúmenes o mapas conceptuales. Se trataría de dar libertad, para que cada uno organice su trabajo de la forma que  le resulte más significativa, y no tratar de imponer un mismo método a toda la clase.

Ayudaría también a impulsar el aprendizaje autorregulado, el hecho de que el profesor oriente una asignatura y en concreto, cada uno de los temas que la constituyen, partiendo de lo que cada alumno sabe. Para ello, se me ocurre el siguiente ejemplo:  el profesor mandaría a cada niño que preparase el tema dándole unas pautas que le sirvan de guía; pero luego sería el propio alumno el que preparase el tema en función de sus intereses, capacidades, conocimientos previos  o curiosidades. De esta manera, habría unos contenidos mínimos que todos los alumnos deberían de saber de cada tema, pero luego cada uno de los alumnos profundizaría y alcanzaría un mayor conocimiento, sobre aquellos aspectos que más le llamasen la atención y sintiese la necesidad de buscar, informarse y aprender sobre ellos.

Luego, para que este aprendizaje autorregulado de cada uno de los alumnos pudiera ser extensible al resto de sus compañeros, el profesor podría dedicar un día de la semana a que cada alumno expusiese y comentese al resto de sus compañeros aquellos aspectos sobre los que ha querido profundizar; comprobando previamente que lo que el alumno va a exponer, sea diferente de los contenidos  mínimos exigidos a todos.