Bajo este título se publicaba ayer un artículo en el
periódico “Diario de Navarra” en el que se trataba el tema de los niños con
altas capacidades.
A pesar de que aún no hemos visto nada en la carrera, a mí
es un tema que me llama la atención, y como futuro pedagogo que soy, es un tema
de actualidad dentro del mundo docente.
En el artículo, muestran la visión y las experiencias de
estos niños, vistas tanto por ellos mismos, como por la sociedad, y no deja de
ser sorprendente como pueden llegar a sentirse estos alumnos si no reciben el
apoyo que necesitan. Tendemos a pensar, que al ser niños que rinden bien y no
presentan grandes problemas, se les suele dejar a un lado y se pone más atención
en aquellos otros que parecen más inquietos, que no centran su atención, o bien
que no son capaces de alcanzar los mínimos exigibles. Sin embargo, se explica
en el citado artículo, las numerosas repercusiones que puede llegar a tener una
actuación de este tipo: falta de motivación, frustración, depresión e incluso pueden llegar a presentar problemas
de rendimiento escolar, por muy raro que nos pueda parecer. Tenemos que tener
presente que un niño inteligente, no lo es siempre, y si no recibe este apoyo
que consideramos adecuado, sus virtudes pueden acabar por desaparecer.
Explican también como la alta capacidad no viene dada por un
cociente intelectual alto, sino que este es un indicador más, así como la importancia
que tiene el diagnóstico y acreditación llevada a cabo por un equipo especializado,
y no a través de pruebas biológicas, ni análisis de resonancia magnética, ni
estudios de ningún otro tipo; ya que ni son ciertos, ni existen.
Conviene también
tener presente que la alta capacidad no es lo mismo que alto rendimiento, habiendo
por tanto grandes variabilidades entre estos colectivos y los alumnos “normales”.
El tratamiento existente actualmente en España, no se
caracteriza por ser amplio ni variado. La respuesta educativa que se tiende a dar no pasa más que por dos
modalidades: atención en el propio centro educativo (respuesta inclusiva), o la
atención en centros especializados; siendo esta mayor en las modalidades de
enseñanza post obligatorias.
A continuación mostraré un documental que podéis ver con tiempo
e informaros más en este ámbito, así como conocer los orígenes del mismo. Pues
considero que lo que se necesita, al igual que con otros grandes temas actuales
en la educación, es concienciación, y cualquier cosa, por pequeña sea, puede
llegar a ser mucho el día de mañana. Por eso todos tenemos que implicarnos,
informarnos y estar constantemente abiertos a aprender más cosas para cumplir
con la función más importante como docentes, y en este caso como pedagogos, que
no es otra que ayudar a crecer a los alumnos.
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